martes, 9 de abril de 2013

¿Lo recuerdas, amor mío?



Me dolía, realmente me dolía alejarme de tí... pero era lo mejor. Luego de todo lo que te hice vivir... no, realmente, no quiero verte en tantos aprietos, así que te digo adiós.
Te juro que me duele, eres la persona más importante para mi, eres mi reina, mi vida... mi todo.
Por favor, deja de llorar, te lo ruego. Es por tu bien, mi niña. Sabes que te amo y quiero lo mejor para ti.
Amor, calla un minuto, siéntate a mi lado y recordemos aquel día que, por casualidades de esta vida, nos conocimos  ¿Lo recuerdas  ¿ Recuerdas que expresión tuve al verte? ¿Recuerdas nuestras primeras palabras? ¿ Recuerdas cuando caímos de aquel árbol? ¿Recuerdas que jugamos a buscar el tesoro? Aquel viejo reloj que  se encontraba tirado en el césped.
¿ Recuerdas que reímos? ¿ Recuerdas que te acompañé a tú casa, y como te sonrojaste cuando besé tu mejilla, despidiéndome  Te prometí volver al otro día, y así fue. Jugamos todo el día y, por un descuido, se soltó tu bella cadena de oro, con aquel dije en forma de corazón. Quedamos hasta tarde buscándole  hasta que la encontramos en aquel árbol, donde todo comenzó. Te ayudé a colocártela y allí sucedió. En un descuido tuyo, besé tus labios, esperando un empujón, un insulto, un golpe... pero no, contrarío a eso, correspondiste a mi beso, abrazando mi cuello con tus delicadas manos. Allí, ambos besándonos con verdadero cariño, allí estábamos dos pequeños niños, mostrando el amor que sentíamos.
¿Recuerdas ese momento, en el que te pedí ser mi novia? Recuerdo que me abrazaste y con una gran sonrisas, dijiste que si. Todavía  al pensarlo, siento como mi estomago se revuelve de felicidad. Te besé, me correspondiste y así estuvimos unos minutos.
¿Recuerdas nuestro primer año de novios? Te llevé a cenar. Tú estabas con un hermoso vestido negro perlado, que ayudaba a resaltar tu blanca piel, tus grandes y rasgados ojos miel y tu hermoso cabello dorado. Yo me encontraba con un traje de vestir, con una corbata suelta, como era mi estilo, un pantalón de vestir, unos zapatos negros. Camisa blanca, desabrochada los dos primeros botones y el saco, de igual colo que los zapatos, la corbata y  el pantalón... negra. Cenamos en aquel restauran que tanto te gustaba, el que estaba a orilla del mar...
Como olvidar tantos hermosos recuerdos... pero lamentablemente todo termina. Fue hermoso mientras duró, pero, amor mío, nada es para siempre. Por favor, no mires así ese anillo de compromiso, se que duele, pero, te pido mil y un disculpas... tu no tienes la culpa de nada.
Seca tus lágrimas, mi pequeña niña, secalas y continua tu vida, sigue adelante, búscate un hombre que te merezca  un hombre que te haga feliz... solo te pido que nunca olvides lo que vivimos, porque fue lo más hermoso que pude pasar...
Vete de aquí, de este lugar de tantos recuerdos, te pido que me vengas a visitar de vez en cuando, por favor.
Aún recuerdo, el último día que te vi, lo último que te dije"Más allá de mi muerte, más allá de la tumba, más allá del universo, siempre estaré contigo, sin importan nada"
Te amo, nunca lo olvides... adiós, mi princesa de los ojos miel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario